Propiedades
En un artículo anterior repasamos la historia de las varillas, su procedencia y evolución. En este post definiremos y explicaremos las cinco propiedades de las que están compuestas. Es muy interesante conocerlas sobre todo a la hora de elegir el equipo con el que queremos jugar, ya que una correcta combinación de estas características hará que podamos sacar un correcto rendimiento al material de golf, adaptándolo a nuestro físico y a nuestro tipo de swing.
Las cinco propiedades de las que estamos hablando son longitud, peso, flexibilidad, torsión y punto de flexión o bend point. Pasaremos a explicar a continuación qué significa cada una.
Longitud
La longitud de los palos de golf está limitada por las Reglas del Golf, que impiden que sean más cortos de 18” y más largos de 48”. La regla tiene como excepción el putter. La longitud de la varilla se mide desde el talón del palo hasta el final de la empuñadura. Como curiosidad, Cobra Golf sacó al mercado a finales del 2011 un driver de 48”, el Long Tom. ¿Éxito de ventas? No, pero interesante. Los profesionales en general juegan longitudes de varilla de 44”/44’5”. Y los amateurs nos empeñamos en que nuestras varillas sean palancas de 45’5”o 46”. Como decía el anuncio de Pirelli: “La potencia sin control no sirve de nada”. En el primer capítulo del libro “The search for the perfect golf club” Tom Wishon habla de un driver con una varilla de 60” y cómo, en una pequeña prueba con amigos, solo un porcentaje muy bajo consiguió pasar un obstáculo cercano. Mucha longitud significa mucha dispersión, lo que me reafirma en la idea de que el largo de una varilla tiene que ser el adecuado, sea un driver o un hierro 9.
Peso
Desde que se crearon las varillas de grafito en la década de los 70 ha variado mucho la horquilla de pesos. Ahora mismo existen varillas muy pesadas de 130-140 gramos hasta ultra ligeras de solo 40 gramos. Una varilla con muy poco peso se va a mover con mucha más facilidad que una pesada, pero estará descompensada la relación peso-velocidad para casi todos los tipos de swing. Varas con tan pocos gramos son casi siempre adecuadas para velocidades de swing lentas y con un tempo de swing también lento. Por el contrario, suele ser habitual que los jugadores con altas velocidades de swing monten en su material varillas más pesadas. Eso le dará a su juego mucho más control.
En cuanto a los materiales de que están construidas las varillas, el acero va de esos 130-140 gramos hasta varillas de 85 gramos. Incluso hay de 75 gramos, pero suelen ser combinaciones de acero y grafito. Mientras que las diferentes opciones de pesos que ofrece el grafito es mucho más amplia. Van desde los 40 gramos hasta los 122-125 en algunas varillas, como la UST Mamiya Recoil Prototype Flex F5. ¡Increíble! En la actualidad el grafito es el material preferido a la hora de elegir nuestras varillas en las maderas, mientras que el acero mantiene su hegemonía en los hierros.
Flexibilidad
En cuanto a la capacidad que tiene la varilla de doblarse sin partirse, existen cinco opciones para elegir: Lady, A o senior, Regular, Stiff o Xtra Stiff. Van aumentando su dureza y resistencia a doblarse frente a la velocidad del swing. Y en general, cuanto más rígida es la varilla, suele aumentar su peso y disminuir su torque. Dependiendo de la velocidad que demuestre el jugador en el swing, será conveniente que juegue una varilla con una determinada flexibilidad u otra. Y es muy importante que nuestros egos, sobre todo el de los varones, no nos impidan jugar varillas blandas. “Juegue la varilla más blanda que su swing le permita”, gran frase a la que no solemos hacer caso. Pero, en general, a mayor velocidad de swing, hace falta más rigidez en la varilla.
Torque
Es la resistencia de las varillas al giro sobre su propio eje. Interesante. ¿Por qué? Pues porque no se le suele dar importancia, y dependiendo de la varilla que estemos eligiendo, la tiene y mucho. Esta resistencia al giro se mide en grados, y podemos encontrar varillas con 8º de torque o con 1’9º-2º. Lo primero, decir que en las varillas de acero el torque es un dato poco relevante, ya que es muy uniforme, varía poco. En este caso solo afecta a las varillas de grafito y en mayor medida a las que están montadas en el driver, porque la masa de la cabeza va a ejercer mayor fuerza rotatoria.
Un jugador con una baja velocidad de swing y un tempo bajo, necesitará un torque alto, para tener una sensación cómoda, o si no, notará mucha dureza en el palo y la bola tenderá a salir baja. Y en el caso contrario, un jugador que tiene una velocidad alta y un tempo medio-alto, necesitará un torque bajo, para que la cara del palo llegue cuadrada y tenga una sensación adecuada. Si a este último jugador le montamos una varilla con torque alto, notaría el palo blando, con poco control, y la cara del palo llegaría normalmente abierta.
Bend Point
Esta propiedad la podemos definir como la distribución de la flexibilidad a lo largo de las tres grandes áreas de la varilla: punta o tip, centro y empuñadura. Los fabricantes pueden crear diferentes grosores en una parte concreta de la varilla, con lo que se puede hacer que una determinada parte de la varilla sea más rígida o más blanda que el resto y de esta manera cambiamos su forma de combarse. Es más, actualmente, el hecho de que una bola vuele más alta o más baja no depende de que el palo tenga más o menos loft, sino de donde se encuentra situado el bend point. Si está cerca de la empuñadura, la bola saldrá baja, y al contrario, si está situado cerca del tip, la bola saldrá alta. Los buenos fitters y clubmakers juegan con esta propiedad de la varilla para ajustar el vuelo y trayectoria de la bola del jugador. Un palo con igual flexibilidad, situando el bend point en un sitio o en otro, estamos cambiamos la percepción de la varilla completamente, e incluso estamos dando una mayor o menor sensación de rigidez.
Ejemplo
¿Cómo podemos hacer ver la importancia de las propiedades de las que estamos hablando? Por ejemplo, en un fitting, es normal que se presente un golfista con una velocidad muy alta de swing, que suele jugar una bola alta, con cierta dispersión, que tiene un swing muy rápido pero con overswing, y con un release o liberación de las muñecas muy temprano. Generalmente tiene una compresión de bola pobre, es decir, no le saca rendimiento a toda la velocidad de su swing, aunque eso no es óbice para que sea un pegador. Necesitará una varilla con una flexibilidad menor a la que se supondría, pero con mucho más peso en su varilla, con un torque medio-bajo y con un bend point cercano a la empuñadura. Y no le vendría mal una vara un poco más corta de lo que es habitual en el palo que está probando (si es un driver, madera de calle o híbrido) para darle un poco más de control, ya que distancia no le falta. Eso conseguirá mantener la cara cuadrada en el momento del impacto, y generalmente levantando mucho menos la bola de lo que estaba acostumbrado. Como vemos, se puede, y debe, jugar con las propiedades de las varillas para adaptarlas a nuestro juego.
¡Nos vemos en la cancha de prácticas!